sábado, 14 de agosto de 2010

Blog en Milenio

Estas últimas semanas había estado publicando este blog aquí y también en Milenio.com, en la sección de blogs. Ya no le veo caso a tener el blog en dos sitios, y sólo voy a mantener el blog de Milenio. La liga es:

http://blogs.milenio.com/blog/147

¡Nos vemos en Milenio! Gracias por su interés...

viernes, 6 de agosto de 2010

Nostalgias digitales


Hace pocos años decidí transferir a archivos digitales las transparencias que tenía de mi larga estancia en Europa. Se trataba de unas 300 diapositivas, la mayoría en rollo Kodachrome. Para los que no conozcan el maravilloso Kodachrome, es un rollo de fotografía a color hecho por Kodak desde 1935, de altísima calidad. Pero de lo que más se acuerda uno es de que no se mandaba a revelar a la farmacia de al lado, no, había que mandarlo por correo a un centro autorizado, y de hecho el revelado ya estaba incluido en el precio de compra del rollo. Bueno, contaba que quería pasar esas fotos a archivos digitales, porque la verdad ya no es tan facil conseguir proyectores de esos de carrousel para proyectar las diapositivas.

Renté un scanner especial para dispositivas, y con la ayuda de mi esposa y hasta de la tía Queta de mi esposa, logramos el fin de semana escanear todas las dispositivas. Una vez terminada esta tarea, les comenté a mi esposa y a Queta que me preguntaba si tirar las diapositivas y conservar solamente los archivos digitales. Queta opinaba vehementemente que un recuerdo de semejante valor no debía tirarse. Mi esposa prefería tirarlas. Yo estaba indeciso. Finalmente, en un arranque de decisión, lancé a la basura los 300 testimonios fotográficos tanto de mi estancia en Europa como de mi aprendizaje de la fotografía con cámara de tipo reflex. Pero debo confesar que en lo más hondo sí tenía un sentido de pérdida.

Resulta que mi episodio personal con la transformación de las fotos, de Kodachrome a digital, era sólo un caso de un fenómeno más amplio. En 2009, Kodak decidió cerrar la producción de Kodachrome, que había mantenido por 74 años, para concentrarse en la dura competencia de la fotografía digital. Kodak simplemente reconoció que la evolución de la tecnología (y sobre todo de su adopción por los consumidores) hacía cada vez más insostenible el negocio de Kodachrome. Tiene tintes dramáticos el hecho de que, para atender a los clientes que ya había comprado algún rollo de Kodachrome -y por tanto pagado el revelado- Kodak ha mantenido abierto un último centro de revelado en Parsons, Kansas. El último rollo de Kodachrome fabricado fue usado en 2009 por el fotógrafo Steve McCurry.

Los fanáticos de Kodachrome no se dieron por vencidos ante una decisión financiera de Kodak, y lucharon por mantener viva la producción de Kodachrome. "Kodachrome es más grande que la vida", decía Andrew Lampert, archivista fotográfico en Manhattan, haciendo referencia que que las fotos de Kodachrome duran siglos, mucho más que una vida humana; "es ireemplazable", continuaba. ¡Y sin embargo yo reemplacé mis diapositivas por archivos digitales!

Una historia similar sufrió la foto instantánea Polaroid. Como sabemos, las cámaras de tipo Polaroid introdujeron la posibilidad de ver en cuestión de segundos la foto que se acababa de tomar, en virtud de un proceso de revelado incluido en la foto misma. Al tomar una foto, la cámara hacía salir una lámina de varias capas, de la que el usuario retiraba una cubierta al cabo de unos segundos. La gente se maravillaba de ver aparecer ante sus propios ojos la foto recién tomada.

Obviamente al aparecer la foto digital, el poder ver al instante la foto tomada ya no era una ventaja de Polaroid. Es más, en la foto digital puedes ver el resultado aún más rápido. Por eso, en febrero de 2008, se anunció el fin de la producción de film Polaroid. Se cerraron 3 fábricas y se despidieron 450 trabajadores.

Claro que los fanáticos de Polaroid no iban a dejar morir tan fácilmente esa tradición. Un grupo llamado "Impossible Project" adquirió una de las fábricas cerradas, en Enschede, Holanda (ver sitio http://www.the-impossible-project.com/). Entre 2009 y 2010 refinaron un producto equivalente al film Polaroid, aunque aún no lo ponen a la venta. Muchos fotógrafos nostálgicos siguen haciendo grandes esfuerzos por conseguir en desvanes un rollo perdido de Polaroid para obtener lo que, según dicen, es una propiedad única e inimitable de ese tipo de foto. Recientemente leí acerca de un proceso de manipulación de fotos Polaroid SX-70, en que frotan la foto aún en proceso de revelarse, usando un gancho de metal o equivalente, para mezclar los colores. El resultado es una especie de imagen impresionista, como por ejemplo la que presentamos al inicio de esta nota.

La nostalgia anti-digital es una emoción universal, que no se limita a la fotografía. Recientemente han salido tocadiscos de discos de vinilo, hasta con diseños estilo "retro", como de radio de los años 40s. No falta quien diga que realmente el sonido de esos viejos discos de vinilo era mejor que el de los CDs. En las salas de cine, muchas películas son ahora pasadas usando proyectores digitales, a veces sin que el espectador se de siquiera cuenta.

Otro caso (que luego trataremos aparte) es el de los libros, que empiezan a ser electrónicos, con lectores tales como el Kindle,el Nook o el iPad y muchos otros. Los lectores electrónicos de libros están hoy en día en la etapa en que se encontraban las cámaras digitales hace unos diez años. Los precios de esos lectores bajan, mientras que la industria editorial se ve cada vez más atraída por la alternativa digital.

Mientras tanto, muchos nostálgicos del libro digital insisten en que el placer de la lectura no puede prescindir del gesto de mojarse con saliva el dedo, y pasar a la siguiente página. Dicen que sin el olor del papel y de la tinta, la lectura no se siente igual. Ya los argumentos de que la lectura digital cansa los ojos no son válidos en los más recientes lectores con tinta electrónica, pero la nostalgia del libro que conocimos en nuestra niñez nunca nos abandonará.

El mundo digital avanza hasta completar el círculo de todo lo que es información: imagen, sonido, texto. Y ante cada avance, nuevos nostálgicos propondrán un regreso, aunque sea ilusorio, a la belleza del pasado... Vamos, ¡tomen valor! ¡arrojen a la basura también ustedes sus transparencias!

viernes, 30 de julio de 2010

¿Investigación científica en Microsoft? El XBox Kinect



Acabo de ir a los cuarteles generales de Microsoft, en la ciudad de Seattle, casi junto a la ciudad canadiense de Vancouver. Me invitaron (gastos pagados, lo que se agradece) a asistir a una reunión anual llamada "Faculty Summit", donde la rama de investigación, llamada "Microsoft Research" o MSR, se reúne con investigadores principalmente de Estados Unidos, y también algunos de América Latina.

Para mucha gente (creo que casi para todos los que no están en investigación), Microsoft se asocia sobre todo a productos como Windows, Word, Excel, cosas así. Es más, entre la gente de tecnología, la reputación de Microsoft no ha sido siempre la mejor, y muchos creen que tiene mejores abogados que ingenieros. Se cree que el gigante aplasta propuestas técnicamente mejores que las de ellos con base en mucha mercadotecnia, dinero y abogados.

Hay que decir que esa imagen de Microsoft se ha alimentado de algunas historias reales. Por ejemplo, se sabe que Bill Gates consiguió el contrato con IBM por el sistema DOS antes de haberlo desarrollado, y que pagaron unos 50,000 dólares a un desarrollados llamado Tim Patterson, que llamaba a su sistema QDOS, por "Quick and Dirty Operating System". El producto puede no haber sido técnicamente grandioso, ni tampoco hecho por Microsoft, pero sí lo fue la forma en que Bill Gates negoció las regalías de MS-DOS. Casi cada computadora personal comprada en el mundo pagaba algunos dólares para el bolsillo de Gates.

Otro episodio que contribuyó a la imagen corporativa con tintes despiadados de Microsoft fue la guerra de los navegadores, que libró contra Netscape en los años 90s. Aún sin ser técnicamente superior a Netscape, por el hecho de venir ya preinstalado en cada computadora, el navegador Explorer terminó por obligar a Netscape a abandonar la lucha en 1998, entregando sus productos al dominio público. Pero el sabor del triunfo no le duró mucho a Gates, cuando Microsoft tuvo que enfrentar costosos juicios antimonopolio.

Sin embargo, puedo decir sin lugar a dudas que la rama de investigación, MSR, tiene el mejor nivel tecnológico a que pueda aspirar una empresa de tecnología. La reunión a la que asistí fue un despliegue de avances científicos, muchos de ellos logrados en cooperación con investigadores de muchos lugares. MSR no es para nada una torre de marfil aislada de la comunidad científica.

Presentaron, por ejemplo, la investigación "Project Natal" sobre reconocimiento visual de siluetas, permitió el desarrollo de "Kinect", el dispositivo que se usará desde el 4 de noviembre en la consola XBOX como control, en vez de los tradicionales controles con botones (ver foto al inicio). Kinect (http://www.xbox.com/kinect) se usa de la forma más simple: uno se pone frente al Kinect y hace movimientos naturales como lanzar una bola de boliche, y el sistema reconoce esos movimientos, reflejándolos en el "avatar" que juega por uno en la consola. Vi demostraciones impresionantes del Kinect, en juegos tales como el descenso de un rio en una lancha. ¡Era divertidísimo ver a los investigadores, tomados como voluntarios, contorsionarse sin pudor frente al público, para controlar la lancha! Yo, como buen latino, me rehusé a hacer el ridículo de esa forma...

También presentaron el proyecto del telescopio virtual (www.worldwidetelescope.org), software con el que se puede hacer viajes virtuales por el espacio, o visitar el planeta Marte, todo en alta definición. En el sitio web hay "tours" virtuales predefinidos, que recomiendo muy ampliamente, son realmente impresionantes.

Tal vez la estrella del evento fue la presentación de los efectos especiales de la película Avatar, que aunque es algo tonta, predecible y trillada en el argumento, tiene imágenes sorprendentes, de un nivel nunca antes visto. Los desarrolladores que trabajaron junto con James Cameron en hacer los efectos especiales de la película, empleados de Microsoft, fueron quienes personalmente relataron su experiencia. En lo personal, me impresionó el desarrollo de la cámara de cine virtual que inventaron para esa película. Como sabemos, en las películas generadas por computadora, los actores usan un traje azul con puntitos blancos que sirven como referencia. El problema es que requiere mucha imaginación filmar en un cuarto vacío con actores vestidos de azul. Entonces lo que desarrollaron es un monitor de computadora que permite al director ver, mientras se está filmando, a los actores en el ambiente virtual en que se desarrolla la acción; en el caso de Avatar, era una jungla tropical. El director Cameron podía ver en el monitor a los actores moviéndose entre una selva lujuriante definida computacionalmente, aunque con menos detalle de como se ve en la versión final.

En el evento de Microsoft pude también saludar a varios colegas latinoamericanos, con los que participo en la organización LACCIR (http://www.laccir.org), con base en Chile, que es financiada parcialmente por Microsoft.

Entonces, ¿investigación en Microsoft? Si, y de la mejor, aunque no sea una asociación de ideas evidente.

lunes, 19 de julio de 2010

Autos eléctricos: ¿una moda?


En la foto que incluyo al inicio de esta nota aparezco junto a un auto eléctrico Tesla, en el sitio de armado Tesla Motors en Palo Alto, frente a la U. de Stanford, cuando estuve el año pasado en California. Uno de estos fue comprado por Arnold Schwarzenegger (aunque luego fue devuelto porque el tipo no cabía bien en la diminuta cabina...

Hoy en día es de lo más "cool" todo lo ecológico, verde, no contaminante. En el terreno de la tecnología automotriz esto se refleja en la compra de autos híbridos por las estrellas de cine y televisión -sin que sean los únicos clientes, claro. ¿Esta forma de ecología es moda, es imagen? Aquí en México alguien que ha sabido explotar la ecología es el llamado "Partido Verde", negocio familiar de extrema derecha presidido por gente tan corrupta como Jorge E. González, que presenta la bandera de la ecología para conseguir votos de incautos.

Y en los automóviles, ¿la ecología no será manejo de imagen, una moda temporal?

Bueno, de hecho los autos eléctricos fueron populares a finales del siglo XIX, antes del dominio del motor de gasolina. Es interesante que el primer auto en romper la barrera de los 100 km/h era eléctrico. Sin embargo la mayor autonomía, menor peso y sobre todo menor costo de los autos de combustión interna les dieron una perdurable ventaja que vemos aún hoy en día.

Más cerca de nuestros tiempos, General Motors hizo un experimento abierto al público, el auto eléctrico EV1. El EV1 fue presentado en Los Angeles durante un auto show en 1990, y no se vendía, sino que se hacía un contrato de renta a largo plazo (leasing en inglés), solamente para habitantes de las ciudades de Los Angeles, Tucson, Phoenix, San Francisco y Sacramento.

Parece ser que el EV1 era un muy buen carro, en opinión de sus 800 clientes, pero no muy buen negocio para GM, la que tuvo costos por 1000 millones de dólares en 4 años, lo que echando cuentas nos da un millón y cuarto de dólares por auto rentado. ¡Uno de los peores negocios en la historia de GM! Por eso, en 2002 el programa de renta fue descontinuado, sin siquiera dar a sus clientes la opción de comprar el carro. Los EV1 fueron colectados para aplastarlos y volverlos chatarra, ante la impotencia de los enfurecidos clientes. Aun hoy en día podemos consultar el sitio http://ev1.org/, donde se presenta una explicación con tintes conspiratorios de la desaparición del EV1. Hay incluso un documental sobre el fin del EV1 (http://en.wikipedia.org/wiki/Who_Killed_the_Electric_Car%3F).

Los carros ecológicos regresaron por sus fueros bajo la variante de los autos híbridos, como el Toyota Prius. A pesar de permanecer como un producto "de nicho", se ha vendido ya por 13 años, pasando en 2008 la marca del millón de unidades vendidas.

Los autos híbridos tienen dos motores, uno de gasolina, que sirve ya sea solo para cargar el motor eléctrico, o bien adicionalmente para entregar potencia a las ruedas. Esta última opción es la que utiliza el Prius, lo que le hace ganar en potencia máxima, al utilizar a la vez sus dos motores. Desde luego la combinación de dos motores introduce complejidad mecánica (y peso) en la transmisión, y eleva el costo total del auto.

Los autos híbridos sí reducen el consumo de gasolina, pero no eliminan totalmente emisiones, como promete ser el caso de los autos eléctricos. Los autos eléctricos tienen, además de su emisión cero de contaminantes, otras promesas muy interesantes, como por ejemplo la simplificación en el control de sus funciones por medio de la electrónica. En efecto, controlar las funciones de un motor de gasolina requiere fabricar actuadores electromecánicos, que no son necesarios en un auto eléctrico.

Otra ventaja potencial de los carros totalmente eléctricos es la simplificación mecánica. En efecto, se han hecho prototipos eléctricos en los que cada rueda es impulsada por un motor independiente, como en el prototipo del MIT "CityCar" (ver http://cities.media.mit.edu/projects/citycar.html). Esta sencilla idea elimina por completo la necesidad de toda la transmisión, la caja de velocidades, el diferencial, y varias otras piezas que hoy en día aumentan el peso (y el costo) de los automóviles. Por otra parte, un auto con 4 motores independientes puede hacer maniobras imposibles en tu auto y en el mío, como girar sobre su propio eje (esto se llamaría, según el MIT, vuelta en O, en vez de vuelta en U)...

En cuanto a los autos eléctricos comercialmente disponibles, la oferta aun no es muy grande. Comentaba al inicio que el año pasado visité el centro de producción del deportivo eléctrico (sí, leyeron bien, deportivo eléctrico) de Tesla Motors, una belleza que acelera de 0 a 100 km/h en solo 4 segundos y tiene una autonomía de 320 km. Pero claro está, el precio (más de 100,000 USD) es excesivo y solamente se han vendido unos mil Tesla Roadsters.

Sin embargo, el mundo automotriz recibió en 2010 la noticia de que Nissan producirá el modelo eléctrico "Leaf" (Leading, Environmentally Friendly), un auto para las masas, con una autonomía de 160km con una carga de las baterías. El Leaf tendrá en Estados Unidos un precio de unos 30,000 dólares, aunque puede ser que los gobiernos ofrezcan estímulos fiscales a los eventuales compradores. De hecho Nissan ya inició exitosamente la preventa del Leaf, lo que muestra el gran interés por el producto. Se venderá también en México, como anunció Ghosn la semana pasada en su visita a nuestro país.

A pesar de las grandes ventajas potenciales de los autos eléctricos, enfrentan un problema práctico: no hay "electrineras", o sea gasolineras para autos eléctricos. En vista de ello, por el momento los propietarios de autos eléctricos tendrán que conformarse con hacer la carga en sus propias casas, lo que es a la vez una ventaja y una desventaja ¿quienes de los actuales propietarios de autos podemos ponerles gasolina en la casa? Claro que si un conductor se queda sin electricidad en la carretera, no es cuestión de pedir aventón con una lata para conseguir combustible...

Alguien me ha comentado que los autos eléctricos no eliminan la contaminación, pues la electricidad que consumen se genera en otro lado... consumiendo combustible! Yo pienso que con generar contaminación en otro lado que no sean las grandes ciudades, ya es ganancia, pero además la electricidad no se genera toda quemando combustible, y la tendencia es que cada vez menos electricidad se genere a partir de combustibles fósiles. En México hay abundante producción de electricidad por presas hidroeléctricas. Y falta por explotar la energía eólica, solar, y finalmente la de fusión nuclear, que promete resolver para siempre y en forma limpia los problemas de energía (ojo: no confundir la fusión con la fisión nuclear, para una explicación sencilla vean la página http://es.wikipedia.org/wiki/Fusi%C3%B3n_nuclear).

¿Los autos eléctricos una moda? En todo caso una moda que durará los próximos siglos.

miércoles, 7 de julio de 2010

Tecnología de desastres


En el siglo XXI a veces nos azotan las mismas catástrofes que a los hombres de las cavernas. La tormenta tropical Alex, que terminó siendo tan devastadora para Monterrey como un huracán, nos dejó con las calles destrozadas, sin energía eléctrica y sin agua en miles de hogares. Las fotos de gentes luchando con cuerdas contra la corriente evocan épocas remotas, en que la tecnología electrónica no existía, y aunque ahora existe, hay situaciones en que es irrelevante.

Para empezar, lo electrónico requiere electricidad, y si está cortada por los desastres naturales, toda su sofisticación tecnológica se la lleva el diablo. Y aunque tenga electricidad, muchas veces depende de la conexión a internet para ser útil. Tan acostumbrados como estamos a depender de la electricidad que ni pensamos en ella, cuando falta sentimos su ausencia y lo precario de nuestra situación. Al menos los celulares tienen conexión inalámbrica, pero su pila se agota rápidamente y se vuelven inútiles...

En qué ayuda, pues, la tecnología en situaciones de desastre como el paso de Alex por Monterrey?

En primer lugar, está la previsión. ¿Realmente sabíamos que venía Alex? Estrictamente sí, pero no tan fuerte. Se suponía que había pasado de huracán a tormenta tropical, y que era cuestión de aguantar unas fuertes lluvias. Pero la realidad nos tomó por sorpresa. Ningún servicio meteorológico lo había previsto en toda su extensión.

Los servicios de pronóstico meteorológico emplean supercomputadoras, trabajando las 24 horas, para correr precisos modelos del funcionamiento de la atmósfera. Aun más, esos modelos van mejorando con el tiempo, porque es posible comparar en todo momento lo que predicen con lo que realmente ocurre, e ir corrigiendo las discrepancias. Sin embargo, a pesar de todos los progresos, todavía el arte de predecir el tiempo está sujeto a un margen de error importante. Muchas gentes tienen fe al pronóstico de la televisora tal, o confía en lo atinado de Mauro Morales, pero a final de cuentas hay todavía algo de adivinación en el pronóstico del tiempo.

Hay una anécdota según la cual, al final de la segunda guerra, el gobierno americano premió a la estación militar de pronóstico de tiempo más atinada en sus pronósticos, que se encontraba en una isla del pacífico. Cuando les preguntaron cómo le hacían el encargado contestó: "Predecimos el mismo tiempo que hizo el día anterior". Hoy en día los métodos no son tan primitivos, pero a veces lo parecen. Pensamos, sin embargo, que en los próximos años los pronósticos de tiempo continuarán afinándose hasta ser una herramienta confiable de previsón de amenazas climáticas.

Al menos, la tecnología electrónica ha permitido en esta ocasión comunicar a los usuarios. El uso de herramientas como el Twitter permitió tener en tiempo real noticias sobre la situación en diversas partes de la ciudad, y hasta coordinar el auxilio a algunas víctimas. Miles de SMS, llamadas de celular y radios de Nextel apoyaron la lucha por capear el temporal.

Hay muchas herramientas tecnológicas que habrá en el futuro y que nos hicieron falta en esta ocasión, como por ejemplo mapas satelitales actualizados en tiempo real, donde se viera la situación de cada calle en cada momento. También sería útil tener mapas colaborativos, donde cada usuario pudiera anotar lo que observa (o sufre) en su propia colonia. Imaginen por ejemplo que en su propio celular, al oprimir un botón de emergencia o equivalente, la señal del GPS se usa para añadir a un mapa un caso de alerta.

Claro que hay muchas colonias pobres donde los usuarios, al menos en los próximos años, difícilmente podrán compara teléfonos con GPS... ¡La tecnología no resuelve la desigualdad social!

domingo, 27 de junio de 2010

Pintores de iPad necesitan impresoras al óleo


Los nuevos productos a veces acarrean nuevas aplicaciones, para las cuales inicialmente no habían sido pensados. En esta ocasión vamos a proponer una posible aplicación del iPad de Apple.

Primero veamos qué es el iPad. Llamado por Apple "dispositivo mágico y revolucionario" en su lanzamiento en abril de este año, para los técnicos no es más que una computadora de tipo tableta, con pantalla táctil, con procesador A4 de 1GHz, 16 o 32MB de memoria, conexión a Internet, y software que incluye en navegador basado en WebKit, y... ¡¡BASTA!! ¿Realmente se puede caracterizar el iPad por una lista de atributos técnicos? Apple se va al otro extremo: para ellos, es un dispositivo "mágico y revolucionario". Ninguno de estos dos adjetivos es realmente un atributo del aparato en sí. Lo "mágico" es más bien una percepción del usuario, no un atributo del iPad. Lo "revolucionario", aún aceptando que fuera cierto, se refiere a los aparatos que existieron antes (al decir que es distinto a ellos), pero no dice qué es lo que sí tiene el iPad.

Lo que sí podemos rescatar de la "definición" de Apple es que lo innovador del iPad no es su hardware, ni sus características técnicas, sino la forma en que el usuario se relaciona con él. Llamar "mágico" al iPad es sólo una estrategia de publicidad, pero ciertamente el usuario no se relaciona con el iPad como lo hace con cualquier computadora. Un aspecto de mucho impacto práctico es el uso de los dedos sobre la pantalla, que aunque ciertamente la llena de grasa, también hace mucho más intuitivo y hasta físico el manejo de la interfaz del usuario.

Hay aplicaciones en las que se usa maravillosamente la interfaz "multitouch" del iPad, como es el caso de los paquetes "SketchBook", "Qvik Sketch", "OmniSketch" y "Brushes". En el sitio de Brushes describe la aplicación como "una aplicación para pintar ... con ... varias brochas realistas, multiples capas, zooming, y una simple pero poderosa interfaz". Hay un grupo de usuarios de Brushes, que presentan una impresionante galería de trabajos en Flickr (página http://www.flickr.com/groups/brushes/pool/).

El arte en iPad ha recibido incluso la atención de los profesionales. El pintor inglés David Hockney de 72 años, quien es considerado uno de los pintores ingleses de mayor influencia del siglo XX, ha adoptado el iPad como su principal medio de producción de arte. Dice Hockney: "Veo al iPad como un maravilloso nuevo medio de dibujo". Hockney comenta que la facilidad de distribuir sus propias imágenes le da poder a la gente, la que no depende ya de medios tradicionales como las galerías. Tras haber hecho unas 300 pinturas en un iPhone, Hockney pasó al iPad, beneficiándose de su mayor pantalla: "Conseguí un iPad, que felicidad! Hasta a Van Gogh le hubiera gustado!", declara el pintor Inglés, autor en el iPad del cuadro mostrado al inicio de este blog.

Yo quiero ir aun más allá de lo que proponen estas aplicaciones. En mi opinión, estos programas podrían reemplazar casi por completo las técnicas de pintura "reales", aunque sea para los aficionados, en el mismo sentido que la fotografía digital ha desplazado a la de rollo entre el grueso de los consumidores. La pieza que falta para que pintar en iPad sea realmente "pintar" es la siguiente: se requiere producir impresoras especiales, que sean capaces de imprimir verdaderos "cuadros", con relieve y textura en la superficie, con brillos de pintura de aceite o con apariencia mate como al embarrar la pintura de pastel seco. Estas impresoras no existen hoy en día, pero deben ser completamente factibles de producirse.

Creo que las impresoras con textura y volumen pueden producirse porque ya hay "impresoras de objetos", que por medio de inyección de material, producen al cabo de un rato un objeto tridimensional, es decir, con volumen. Este proceso se conoce en inglés como "3D printing", y en años recientes ha reducido su costo, haciéndose accesible para empresas medianas. Lo que ahora propongo no es tan exigente técnicamente como el 3D printing, es únicamente imprimir con un poco de relieve, simulando las pinceladas o el embarrar un material como por ejemplo el acrílico, o dejar caer gotas sobre el lienzo, en el estilo de Pollock. Además habría que imitar el grado de brillo, como comentamos antes, pero esto debe ser aún menos difícil.

Imaginen la revolución que esto provocaría en los aficionados a la pintura. La facilidad de producir un cuadro pasando los dedos sobre la pantalla del iPad no se compara con la suciedad que implica manejar pinturas al óleo, acrílicos, o aún pastel. Mi tío Rafael Simón (qepd) empezó a pintar al óleo tras jubilarse, y recuerdo que tenía un cuarto permanentemente lleno de materiales, con pinturas a medio trabajar, oliendo a potentes solventes químicos, y con múltiples manchas en suelo y paredes, que aunque indudablemente tienen su encanto, su lado práctico es pésimo.

Mi idea es que los pintores de iPad elaboraran sobre la tableta de Apple sus cuadros, e imprimieran los mejores de ellos para enmarcarlos, regalarlos, venderlos o lo que sea, de una manera muy similar a como actualmente hacemos con la foto digital: no imprimimos la mayoría de las fotos que tomamos; de hecho creo que es una pequeña parte. Solamente las gentes de la generación anterior quieren ver todas sus fotos en papel, de otra forma no sienten que realmente las tomaron. Los jóvenes y no tan jóvenes, pero que adoptamos las nuevas tecnologías, tomamos muchísimas fotos, pero imprimimos unas cuantas.

Las impresoras de cuadros estarían en negocios especializados, tal vez por internet, a los cuales sube uno el archivo digital, y ellos envían por correo el cuadro terminado. También podría haber quioscos parecidos a los que Kodak pone para que uno inserte el USB con los archivos. En fin, son muchas las posibilidades.

Por lo pronto, yo sería usuario de ese servicio, si alguien me lo ofrece. ¿Se animan?

sábado, 19 de junio de 2010

Google TV y el dominio del... sofá


Google ya domina los mercados de Internet de las búsquedas de páginas y de videos, y tiene un buen tramo avanzado en el dominio de los Sistemas operativos, al menos para celulares- con el Android, que es adoptado cada vez más ampliamente en los "smartphones". Pero a pesar de sus grandes avances en estos y otros dominios (aplicadiones en línea Gdocs, almacenamiento de fotos en Picasa, correo electrónico en Gmail), hay un área que se ha resistido no solo a su dominio, ni siquiera le han dejado entrar. Esta es la sala de las casas, donde la TV reina solitaria, alimentada ya sea por las ondas de la TV pública, o bien por un cablecito de aspecto inocente, pero que nos hace pagar una cuenta mensual para poner los pelos de punta.

En efecto, la tele es un mercado enorme. En cada media hora de programa en TV hay unos 8 minutos de comerciales, que en cadena nacional para Estados Unidos cuestan entre 100,000 y 2,000,000 de dólares, dependiendo del programa que se transmite, y muy en particular del "rating" del mismo. En un "Super Bowl" se ha llegado a cobrar alrededor de 2.5 millones de dólares por los 3 segundos, lo que da 83,000 dólares cada segundo, ¿cómo ven, se animan a pagar uno?

Además de la publicidad, están los ingresos de los distribuidores comerciales de señal, los "carriers", tales como Cablevisión, SKY, y otros para México, o Time Warner, Comcast y otros para Estados Unidos, que también son mercados enormes, con más de 50 millones de suscriptores tan solo en Estados Unidos.

¿Porqué pongo esos datos del mercado americano de la tele? Pues porque son los interesados en que las cosas no cambien mucho. Ellos son quienes han mantenido a la TV muy por debajo de sus posibilidades tecnológicas.

Recuerdo que en 1991 fui a Colombia a dar una conferencia, en plena época de bombazos en Medellín, y del encarcelamiento de Pablo Escobar. Bueno, pues en esos lejanos tiempos los comenté a los asistentes a mi plática, que no estaba lejano el día en que la televisión estuviera ligada al Internet, y les decía "Cuando vean en la tele anuncios con ligas de Internet que puedan picar para consultar informaciones, acuérdense que un mexicano fue quien se los dijo primero". Pues estamos en el 2010 y esa tecnología todavía no ha llegado, aunque ahora Google propone algo similar con su anuncio de Google TV el 20 de mayo de este año, casi 20 años después de mi modesta profecía.

Lo que pasa es que en esos tiempos yo era joven e inocente. No me daba cuenta de que la posibilidad tecnológica no es suficiente para que las cosas se lleven a cabo. También se necesita conciliar poderosos intereses económicos, en nuestro caso las cadenas televisivas y los "carriers", y por mucho tiempo no ha sido posible convencerlos de cambiar ni tantito su negocio. Entiendo su punto de vista, pues mientras hay crisis en los medios impresos y en la industria de la música, la TV se ha mantenido como negocio boyante.

Es más, Google TV no es la primera propuesta de una "cajita" con conexión a servicios adicionales basados en Internet; a mediados de los 90, Microsoft adquirió una compañía llamada WebTV, y ofreció un servicio bastante limitado, que permitía navegar en la web desde la tele. Pero no era la TV integrada al Internet, pues la programación de TV no contenía ligas de Internet ni se podía iniciar un programa de TV a partir del Internet. La WebTV fue un fracaso mayúsculo, que Microsoft asumió con mucha filosofía, abandonando discretamente el proyecto. Ni el gigante de Redmond pudo con el reto.

Bueno, ¿y ahora qué ofrece Google TV para ser exitosa donde otros han fracasado? En realidad, directamente Google no ofrece casi nada, salvo búsqueda de programación. Ofrece también un navegador Chrome con el que se puede navegar en la web, cosa que ya se ha hecho mucho antes, como comentamos. Creo que el verdadero filo de la propuesta de Google es que ofrece una plataforma desde la que los desarrolladores pueden ofrecer maravillosos servicios. En efecto, se pueden hacer aplicaciones con base en el sistema operativo Android, lo que permite adaptar a la tele las miles de aplicaciones existentes en el Android market; esto es mucho más poderoso que el desarrollo de "widgets" para televisores avanzados como los Viera de Panasonic. Por otra parte, Google convenció a Sony, Intel y otros de ofrecer el hardware para las teles con estas capacidades, además de la opción de agregar una cajita para usar Google TV en los televisores actuales. Hay que reconocer que los socios de Google en esta aventura son de alto calibre.

Finalmente, ¡vamos, estamos hablando de Google! Si ha relegado al papel de segundón a Microsoft en las búsquedas por Internet, capaz que también puede superarlo en sus incursiones por la TV integrada al Internet. El año pasado, que fui al campus de Google en Mountain View, California, invitado para participar en su reunión anual con los investigadores americanos, pude constatar de primera mano el potencial de desarrollo e investigación del gigante de las búsquedas. No nos extrañe que en unos años también incursione en proyectos de autos eléctricos, energía solar, y muchas otras cosas aparentemente poco relacionadas con su negocio. La pregunta es ¿no estará abarcando Google demasiadas cosas? Sólo el tiempo lo dirá...